Con estos antecedentes, se elabora un plan de negocios que integra el análisis financiero, los costos estimados, los plazos de ejecución y la estrategia de comercialización. Este plan sirve como guía para estructurar las etapas posteriores y asegurar la viabilidad técnica y económica del proyecto.

La fase de implementación considera la coordinación de todas las especialidades involucradas: arquitectura, cálculo estructural, instalaciones eléctricas, sanitarias y de climatización, entre otras. Además, incluye la gestión de licitaciones y la supervisión de las obras para garantizar el cumplimiento de los estándares de calidad, los plazos y los presupuestos definidos.

Plan de negocios y estrategia

Implementación y coordinación técnica

Durante el desarrollo del proyecto, se realiza un seguimiento constante mediante reportes de avance técnico y financiero, los cuales permiten tomar decisiones oportunas y aplicar medidas correctivas cuando es necesario.

Cierre y entrega a clientes

Seguimiento y control del proyecto

Finalmente, una vez concluidas las obras y obtenidas las recepciones correspondientes, se entregan las unidades a los clientes finales, completando así el ciclo del proyecto inmobiliario.

Distribución de utilidades y cierre administrativo

Concluida la entrega de las unidades y regularizadas las obligaciones del proyecto, se procede a la distribución de las utilidades entre los inversionistas, de acuerdo con lo establecido en el plan de negocios. Paralelamente, se dejan fondos provisionales destinados a cubrir eventuales gastos de postventa, garantías, trámites administrativos y el cierre definitivo de la operación, asegurando así una finalización ordenada y transparente del proyecto inmobiliario.